Aguado no contempla usar una cartilla de vacunación, la iniciativa estrella de Ayuso (10/12/2020).

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La presidenta de la Comunidad de Madrid anunció a finales del mes de julio que su Ejecutivo impulsaría la creación de una cartilla covid-19, lo que abría la puerta a la desigualdad y discriminación entre ciudadanos por motivos de salud.

La presidenta Isabel Díaz Ayuso anunció a finales del mes de julio que el Ejecutivo que ella preside impulsaría la creación de una cartilla covid-19 para que las personas que tengan anticuerpos o tengan una PCR negativa puedan realizar una vida normal. Una iniciativa muy cuestionada por la comunidad científica, que advirtió de que no era posible ni funcional por la falta de evidencia probada, además de su falta de legalidad jurídica, puesto que abre la puerta a desigualdades y discriminaciones por motivos de salud.

Tras el revuelo generado, la iniciativa quedó paralizada, pese a que la presidenta anunció que se llevaría a cabo un "proyecto experimental" en septiembre y así lo defendió durante varias semanas. Desde la consejería de sanidad informaron el pasado mes de noviembre que esta cartilla se utilizaría de manera voluntaria y únicamente con efectos informativos  y no serviría para acceder a espacios cerrados como gimnasios, cines y museos, como anunció Ayuso.

Este miércoles el vicepresidente del Ejecutivo madrileño, Ignacio Aguado, ha asegurado que "no se contempla en la actualidad" su puesta en marcha. "A día de hoy lo que contemplamos es que esa vacuna aparezca en el catálogo de vacunación aprobado por el Ministerio de Sanidad y expedido por la Consejería de Sanidad", ha señalado el también portavoz tras el consejo de Gobierno.

El dirigente de Ciudadanos ha explicado que será una "vacuna más" cuyo registro "quedará notificado a los ciudadanos y a la Salud Pública". "Eso es lo que a día de hoy se contempla, no hay nada más encima de la mesa", ha zanjado. Estas declaraciones llegan después de que en Reino Unido hayan comenzado ya su campaña de vacunación con la muestra de Pfizer-BioNTech, utilizando para ello una tarjeta similar a la que planteó Ayuso.

Esta cartilla de vacunación ha generado polémica en el país, ya que los expertos en materia jurídica denuncian que podría convertirse en una suerte de pasaporte que permitiría a los que se vacunen moverse libremente, mientras  se limitan los derechos de quienes no lo hagan, lo que crea una situación de desigualdad y discriminación. En Reino Unido la vacuna contra la covid-19 no es obligatoria.

Enlace relacionado Público.es 09/12/2020.